2021 está siendo un gran año para Dogecoin (DOGE). Justo cuando todos pensaban que la moneda estaba saliendo, sacó una Madonna y regresó más fuerte que nunca. Por supuesto, gran parte de su crecimiento se debe a los tuits de Elon Musk sobre el tema, pero esto no hace que la carrera alcista sea menos impresionante.
Durante más o menos tres años, DOGE ha mantenido el mismo precio, por lo que muchos asumieron que se dirigía hacia su tumba. Nadie se acordaba ya de ella, pues toda la atención estaba puesta en Bitcoin (BTC) y Ethereum (ETH). Pero entonces Musk tenía algo más que decir.
En enero de este año, Musk tuiteó “DOGE”. Minutos después, el precio subió y llegaron los inversores que estaban FOMO-ing.
Muchos pensaron que esto era solo un esquema de bombeo y descarga, pero eso no era cierto.
Cada vez que Musk tuiteó sobre DOGE, su precio crecía. La gente trató de encontrar patrones en sus tuits para saber cuándo comprar y cuándo vender. El precio de DOGE pasó de menos de un centavo a 80 en un par de días, elevando las ganancias en más del 10.000%.
La gente empezó a hablar de lo legal que era todo esto, pero Musk no parecía violar ninguna ley. Esto ha dado lugar a meme coins.
Durante los siguientes cinco meses, la moneda subió y bajó, generalmente siguiendo el patrón de Bitcoin, pero pronto el zumbido comenzó a desvanecerse.
Dado que muchas personas hicieron compras cuando el DOGE era el más caro, el colapso que siguió finalmente hizo que muchos perdieran sus inversiones. Musk no ha tuiteado nada sobre DOGE desde abril.
A pesar de todo esto, la burbuja no ha estallado y DOGE actualmente cotiza a 24 centavos, ¿aún hay esperanza?